Pizza de verduras

Nada sabe como una pizza casera hecha con amor, ¡y es tan sencilla de hacer que no vas a poder parar de hacerla! Aquí te proponemos esta receta, pero no dudes en experimentar con tus verduras favoritas. Añade queso vegetal si quieres, para darle ese toque final característico.

Ingredientes

PARA LA MASA

  • 300 g de harina integral
  • 20 g de levadura de panadero prensada (o un sobre de levadura en polvo)
  • 1 vaso de agua tibia
  • 1 cucharadita de sal
  • 2 cucharadas de aceite de oliva

PARA LA GUARNICIÓN

  • Tomate frito casero
  • Verduras variadas crudas de las que se tengan a mano (cebolla, pimiento verde, pimiento rojo, brócoli, champiñones…)
  • Sal
  • Pimienta negra
  • Aceite
  • Aceitunas negras
  • Orégano

Preparación

Haz un volcán con la harina y pon en el centro la levadura disuelta con el agua tibia, la sal y el aceite. Amasa primero con los dedos y luego con las manos. Hay que trabajarla hasta que queden ligados todos los ingredientes y la masa ligera. Ponla en un recipiente untado con aceite cubierto con un paño húmedo y déjala cerca de alguna fuente de calor indirecta (por ejemplo el horno precalentado y apagado).

Cuando doble su volumen (aproximadamente en una hora), extiéndela sobre una superficie harinada con la ayuda de un rodillo. Puedes darle forma redonda o cuadrada y dejarle el grosor que más te guste: fina si la quieres crujiente o gruesa si la quieres esponjosa. Píntala muy ligeramente con aceite y pincha con un tenedor la superficie. Ahora cúbrela con el tomate frito, repartido por toda la superficie y pon encima el resto de los ingredientes. Al final se puede espolvorear con orégano y añadir un chorrito de aceite, sal y pimienta. Finalmente decórala con unas aceitunas negras. Precalienta el horno a 180-220ºC. Introdúcela de 15 a 20 minutos o hasta que veas que empieza a dorarse y la masa esté en su punto.