Por los animales

Julia

La historia de Julia está llena de valentía y ganas de vivir. Muchos animales de granja como ella tienen historias similares pero sin este final feliz. En las granjas industriales y mataderos el abuso y la falta de compasión es estremecedora. La ganadería industrial es responsable del peor maltrato animal conocido.

Julia vivía atrapada en una oscura granja industrial. Pasaba los días en una sucia jaula tan pequeña que no podía ni darse la vuelta. Así viven parte de su tiempo las madres en estas granjas. Era inseminada artificialmente una y otra vez para dar a luz más y más cerditos para la industria de la carne. Cada separación de sus pequeños resultaba desgarradora para ella.

Una vez separados de Julia, los cerditos fueron sometidos a prácticas comunes en esta industria: les cortaron el rabo, los dientes y los testículos, todo sin anestesia. Imagina su sufrimiento; el maltrato animal es omnipresente en granjas y mataderos.

Julia fue muy afortunada al ser rescatada de aquel lugar estando embarazada y llevada al refugio de animales Farm Sanctuary. Ahora vive allí junto a sus 16 de sus pequeños, a los que dio a luz al poco de llegar. Sus cuidadores dicen que no hay madre más cariñosa y protectora que ella. Foto: Farm Sanctuary

Ronnie

Ronnie es un valiente y afortunado pollito que estaba en manos de la industria cárnica. Fue rescatado de una granja industrial donde vivía hacinado junto a decenas de miles como él. El maltrato animal de los pollitos es terrible; son uno de los animales de granja más maltratados por la ganadería industrial.

Estos animales han sido sometidos a selección artificial para acelerar su ritmo de crecimiento y ser enviados antes al matadero. Si un bebé humano creciese a la misma velocidad que ellos, en tan solo dos meses pesaría 300 kilos. Sus músculos se desarrollan tan rápido que sus huesos no pueden soportar el peso y padecen dolor crónico. Muchos ni siquiera llegan al matadero: mueren en las granjas sufriendo agónicamente.

Por suerte, Ronnie se ha librado del cruel destino que le esperaba y ahora vive en un refugio para animales de granja en donde es atendido y cuidado como él se merece.

Basilico

Basílico es un inteligente corderito rescatado por Igualdad Animal en Italia, evitando así su destino.

Nuestros investigadores revelaron el sufrimiento que padecen estos animales en la industria italiana de la carne de cordero. Las imágenes de la investigación muestran a corderos como Basílico siendo sacrificados estando aún plenamente conscientes.

El camino de estas pequeñas crías hacia el matadero es estresante y repleto de dolor físico y psicológico. Muchos de ellos sufren fracturas y otras lesiones al ser manipulados violentamente.

Basílico se salvó de todo eso; ahora vive en libertad, rodeado de personas que le quieren y le respetan. Le encanta explorar el mundo a su alrededor, hacer amigos y disfrutar de las caricias de sus cuidadores.

Lisa

Lisa es una gallina inteligente y muy curiosa. Observa atentamente todo lo que sucede a su alrededor. Al igual que a los gatos, le encanta que sus cuidadores la cojan en brazos y la acaricien, ¡nunca se cansa de recibir mimos!

El equipo de investigaciones de Igualdad Animal rescató a Lisa de una granja de gallinas ponedoras; de no haberla rescatado habría estado poniendo huevos hasta que su cuerpo se agotara, momento en el que habría sido enviada al matadero.

Las gallinas como ella viven hacinadas en enormes granjas de la industria del huevo, sin poder desarrollar sus instintos naturales. Lisa fue muy afortunada.

El destino de los pollitos macho en la industria del huevo es horrible: como no ponen huevos y no son utilizados para carne, son triturados o aplastados nada más nacer. Sus despojos son utilizados para elaborar piensos con los que se alimenta a los animales en la ganadería industrial.

Pero Lisa es libre ahora y se está recuperando de los abusos en la granja. Poco a poco va convirtiéndose en una gallina feliz que puede satisfacer sus instintos y explorar su entorno.

Lili

La historia de Lili es desgarradora. Esta pequeña llamó la atención de los investigadores de Igualdad Animal mientras realizaban un reportaje en el interior de una granja de engorde de patos en Alemania.

Durante su corta y miserable vida nunca sintió el calor de la luz del sol; jamás conoció a su madre ni fue parte de una protectora familia, como los patos en la naturaleza. Además, nunca estuvo en contacto con el agua, un elemento esencial para estos animales.

Hoy en día los patos son hibridados artificialmente para que crezcan lo más rápido posible y así obtener su carne. Debido a este acelerado ritmo de crecimiento los pequeños patos se debilitan; algunos ni siquiera pueden mantenerse en pie y agonizan en el suelo sobre sus espaldas, muriendo de sed.

Elsa

Elsa es una vaca joven y como todas las vacas, muy inteligente. Una mañana la encontraron en el patio del refugio de animales de granja Hof Butenland, en Alemania. Había escapado de una granja de la industria láctea; parecía como si supiese que en el refugio le acogerían y darían protección. De manera instintiva había tomado la mejor decisión posible.

Elsa evitó su terrible destino. Si no hubiese escapado, al año y medio de edad habría sido inseminada artificialmente; desde ese momento en adelante habría dado a luz una vez al año y en cada ocasión, le habrían quitado a su pequeño nada más nacer y vuelto a inseminar artificialmente al poco tiempo.

Los peces y otros
animales marinos

Numerosos estudios científicos nos han mostrado lo parecidas que son las vidas emocionales de los peces y las de animales cercanos a nosotros como aves y mamíferos.

Los peces son criaturas fascinantes. Tienen una memoria increíble; por ejemplo, pueden recordar durante años una ruta que solo hayan seguido una vez; también mantienen complejas relaciones entre ellos y tienen compañeros favoritos con los que prefieren estar y desplazarse.

Algunos peces son capaces de construir pequeños castillos de arena para protegerse de sus enemigos; otros utilizan herramientas tales como piedras para conseguir acceder al alimento; otros construyen pequeños jardines de algas que cuidan con regularidad.

A pesar de esto, cada año miles de millones de peces son víctimas de la industria pesquera comercial; y no solo peces, también ballenas, delfines, tortugas y otras animales marinos quedan atrapados en redes enormes y son devueltos de nuevo al mar, ya muertos o con profundas heridas a causa de ser manipulados violentamente.